Tras su desafortunada salida y el título perdido, Rene Rast se plantea dar marcha atrás: por qué el final de su carrera en el DTM no es en absoluto seguro
¿Dará Rene Rast marcha atrás en su retirada del DTM tras la fallida final del DTM en Hockenheim? Dos semanas después de la final de la temporada, en la que fue víctima de una reacción en cadena tras el duelo con el campeón Ayhancan Güven en la primera vuelta, el tres veces campeón deja claro que quería despedirse del DTM de otra manera e incluso que se está planteando volver.
«Me había imaginado mi última carrera del DTM de otra manera», afirma Rast. «Mi carrera terminó prácticamente después de media vuelta. Me hubiera gustado luchar hasta el final en la pista, pero lamentablemente no fue posible. Por eso echo un poco de menos esta última carrera, pero también la última vuelta en particular».
Según sus propias declaraciones, se había propuesto para la última vuelta «dar las gracias una vez más a los aficionados, hacer los donuts habituales y quizá algunas otras cosas». Ahora es «extremadamente amargo» despedirse sin ese final.
«Todavía me duele no haber corrido esta carrera»
Esto es válido para él mismo, pero también su equipo Schubert juega un papel importante en estos pensamientos. «Puedo decir sinceramente que mi equipo vive este deporte como casi ningún otro. Y rara vez he visto a un equipo que se haya volcado tanto en el DTM», afirma Rast.
Las imágenes del pit lane después de la carrera, cuando «todos tenían lágrimas en los ojos y estaban realmente en estado de shock», le mostraron a Rast lo mucho que habría significado para el equipo el título del DTM con él. «Me duele mucho no haber podido regalarles este título a los chicos. Y por eso todavía me duele no haber podido correr esta carrera».
¿Retirada de la retirada? «Es extremo cómo te invaden las emociones»
Él mismo necesitó «una semana» después de la decepción «para volver a estar más o menos centrado y no tener que pensar en ello todos los días», admite el piloto oficial de BMW de 38 años. Durante esa semana también le preocupó la cuestión de si quería revisar su retirada, anunciada el viernes por la noche antes de la final del DTM.
«Por supuesto que me preocupaba esa cuestión, y fue una de las preguntas clave de la semana después del fin de semana. Es increíble cómo te invaden las emociones en una semana así. Vas de arriba abajo, arriba abajo, sí, no, de un lado a otro, esto y lo otro», explica Rast, dando una idea de su estado de ánimo. «Luego encuentras nuevos argumentos a favor y en contra. Y cada día cambias de opinión. Por eso ha sido una primera semana muy interesante», sonríe.
«Me gustaría correr esa última ronda en algún momento».
¿Cuál es la situación actual? «Dos semanas después, seguiría diciendo lo mismo: mantengo lo que he dicho», afirma Rast. Sin embargo, matiza: «¿Quién sabe lo que pasará en enero o febrero? Quizás para entonces las cosas hayan cambiado de nuevo. Nunca se debe decir nunca, pero por ahora estoy muy satisfecho y muy contento con la situación tal y como está. Veamos qué hay realmente en la agenda a principios del año que viene».
Sobre todo porque, en teoría, también existiría la posibilidad de volver como piloto invitado, como hizo en su día Mattias Ekström, y despedirse así dignamente de los aficionados al DTM. «Todavía tenemos mucho tiempo para pensar en ello», dice Rast, quien revela que ni siquiera sabe exactamente cuándo comienza la próxima temporada (calendario del DTM 2026). «¿Cuándo empieza? ¿En abril? ¿En mayo?».
Pero precisamente por eso siempre ha hablado de una retirada «provisional» y ha dejado la puerta abierta. «Me gustaría correr esa última vuelta en algún momento, sea cual sea la forma», admite Rast. «Se nos ocurrirá algo bonito. Ya veremos».
Los próximos meses decidirán el futuro
Sin embargo, por el momento no tiene ninguna idea de si se tratará solo de una participación como invitado, una vuelta de exhibición o incluso una temporada completa. «Puede ser desde una vuelta hasta una carrera o hasta diez años en el DTM», sonríe.
No se ha fijado ninguna fecha límite para ello. «Voy a esperar hasta Navidad y luego veré qué hay debajo del árbol», bromea Rast, que se alegra de que, tras la final del WEC en Baréin del 6 al 8 de noviembre, el automovilismo pase a un segundo plano durante unos meses.
Entonces podrá asimilarlo todo y pasar más tiempo con la familia, tal y como tenía previsto. «Y quizá también me aburra después de dos meses», dice encogiéndose de hombros. «Quizá entonces diga: ¡Fue una decisión equivocada!».
