Yuki Tsunoda lucha en Red Bull con su confianza en el coche y las expectativas, pero antes del Gran Premio de Canadá, el japonés se llena de esperanza
Desde su incorporación al equipo A de Red Bull, Yuki Tsunoda está bajo una intensa observación. La temporada 2025 de Fórmula 1 supone para el japonés algo más que retos deportivos. Exige capacidad de adaptación, madurez mental y sensibilidad técnica. Hasta ahora, no ha cumplido las expectativas.
Tsunoda solo ha sumado puntos en tres de las nueve carreras disputadas. La diferencia con su compañero de equipo, Max Verstappen, ya es de 127 puntos. Tras un fin de semana difícil en Barcelona, donde terminó en 13.ª posición, Tsunoda espera ahora dar un giro a la situación en Canadá.
Su resumen tras la carrera en España es claro: «Para ser sincero, no puede ir peor que este fin de semana». Ya de camino a la parrilla de salida se dio cuenta de que el coche no había mejorado. Los cambios de configuración que se realizaron a última hora sirvieron de poco.
«El último paso no ha servido de mucho. Pero, aunque el ritmo no era el que esperábamos, estaba bien en comparación con el pelotón medio y había potencial para sacar más», cree Tsunoda.
Sin embargo, el piloto de Red Bull no se lamenta por haber salido desde el pit lane: «Probablemente fue mejor así. Al menos es algo de lo que podemos aprender. Estoy agradecido de que el equipo me haya apoyado plenamente y haya aceptado este cambio de configuración. Pero sí, al final no se notaba realmente la diferencia».
Aún falta confianza total en el coche
Hay un tema central en las declaraciones de Tsunoda: aún no ha encontrado el punto de acceso al Red Bull RB21. «Con el coche anterior sabía lo que pasaba en segundo plano, cómo se comportaba el coche. Podía sacarle más partido. Pero aún no confío plenamente en el coche. En cierto modo, es normal».
Esta inseguridad se nota especialmente en la clasificación, donde cada centésima cuenta. «Esos milisegundos, esas décimas, son decisivos. Y Max es capaz de sacarle más partido que yo», afirma.
No obstante, Tsunoda ve los primeros rayos de esperanza: «Ha sido un sube y baja, pero al menos estoy contento con el ritmo que estoy mostrando en algunas sesiones. Para llegar al nivel de Max, todavía tengo que dar muchos pasos. Pero en algunas sesiones al menos he podido mantener el ritmo. Es una mezcla».
Canadá como rayo de esperanza: cambios previstos
Una posible clave para mejorar es el trabajo en el simulador. Pero Tsunoda se muestra realista: «En mi opinión, el simulador es más para que el equipo pruebe cosas que queremos probar en la pista. El tiempo allí es muy limitado, así que no podemos probar todas las configuraciones».
«Queremos explorar algunas cosas. Quizás mi ingeniero encuentre una buena dirección o unas características que se adapten a mi estilo de conducción», afirma el japonés con la vista puesta en el futuro.
Una cosa está clara: Red Bull ha planeado una nueva dirección para Canadá en estrecha colaboración con Tsunoda. «Es algo que queremos probar en Canadá. Me alegro de que el equipo esté totalmente comprometido y se esfuerce por proporcionarme algo que quiero probar. Espero que marque la diferencia».
Cuando se le pregunta si el circuito de Canadá le favorece a él o al coche, el piloto de Red Bull responde: «No sé si he sumado puntos allí. El año pasado estaba entre los puntos hasta que hice un trompo en las últimas vueltas».
Así pues, sus recuerdos son contradictorios, pero, en general, a Tsunoda le gusta el circuito Gilles Villeneuve: «Es un circuito que, en realidad, me gusta bastante».
