Hace un año, Ralf Rangnick estaba a punto de fichar por el Bayern de Múnich. En una entrevista, el técnico de 65 años ha explicado ahora por qué decidió no fichar por el club alemán. Y qué planes tiene para la selección austriaca.
¿Se va o se queda? Esta pregunta acaparó toda la atención del fútbol austriaco en abril del año pasado. El motivo: el gran FC Bayern de Múnich había elegido a Ralf Rangnick como sucesor ideal de Thomas Tuchel tras la negativa de Xabi Alonso. «Pasé una noche en vela pensando en ello», ha revelado ahora Rangnick al diario Blick. Finalmente, a principios de mayo se decantó por la selección nacional austriaca y rechazó la oferta del campeón alemán.
«Habría tenido un doble mandato durante dos meses y medio debido a la fase final de la Eurocopa con Austria. Eso no es posible», explicó Rangnick un año después, justificando su sorprendente decisión. No se arrepintió: Austria causó sensación en la Eurocopa de Alemania y ganó el Grupo D por delante de Francia y los Países Bajos.
Sin embargo, los austriacos no lograron dar el gran salto y quedaron eliminados en octavos de final tras caer por 1-2 ante Turquía. Marcel Sabitzer y compañía también tuvieron que lidiar con una decepción en la Liga de Naciones: en la repesca contra Serbia, no lograron ascender a la Liga A.
Austria no participa en un Mundial desde 1998
El próximo objetivo del equipo de Rangnick es ahora clasificarse para el Mundial de 2026 en Estados Unidos, Canadá y México. La última vez que Austria participó en un Mundial fue en 1998, y esta vez los futbolistas austriacos partirán como favoritos en el Grupo H. Los austriacos disputarán su primer partido el 7 de junio en el estadio Ernst-Happel de Viena contra Rumanía.
Al parecer, en la república alpina no hay que preocuparse de que Rangnick pueda seguir en verano alguna de las numerosas ofertas del extranjero. «Austria lleva 28 años sin participar en una fase final de la Copa del Mundo. Quiero alcanzar este objetivo con el nuevo impulso y la euforia generados», afirmó el técnico de 65 años, que volvió a destacar la extraordinaria cohesión entre la selección y el cuerpo técnico: «Estamos tan unidos y en sintonía que funcionamos más como un equipo de club que como una selección nacional».
Rangnick: «No hay que hacer concesiones»
Últimamente, las relaciones entre la presidencia y Rangnick han sido mucho menos armoniosas. En marzo, el presidente interino de la ÖFB, Wolfgang Bartosch, y el jefe del estado federado de Baja Austria, Johann Gartner, llamaron la atención con críticas claras hacia Rangnick en la revista Profil. «Los líderes con ideas claras nunca son fáciles. Precisamente en un país pequeño en el fútbol hay que prestar atención a cada detalle y hacer algunas cosas mejor que los grandes», replicó Rangnick. «Hay que ser absolutamente profesional en el equipo y en el entorno y no se pueden hacer concesiones. Eso puede resultar agotador para algunas personas».
Bajo la dirección del presidente designado de la ÖFB, Josef Pröll, que será investido oficialmente el 18 de mayo en la Asamblea Federal en Bregenz, pronto volverá la calma a la federación dividida. Al menos, el ex político no tendrá que preocuparse (por ahora) por el caso Rangnick.






