Con algo de esfuerzo, Serbia se impuso a la modesta Portugal. Sin embargo, el partido se vio empañado por la lesión del capitán Bogdan Bogdanovic y una acción innecesaria de Filip Petrusev.
Los serbios vencieron por 80-69 a la modesta Portugal, que en algunos momentos del último cuarto se acercó a siete puntos. Sin embargo, el entrenador Svetislav Pesic se permitió el lujo de no sacar a Nikola Jokic (23 puntos, 8/10 tiros de campo, 10 rebotes) en el último cuarto, y acertó. Los triples de Ognjen Dobric y Aleksa Avramovic calmaron los ánimos.
Además de Jokic, en el último cuarto también faltó el capitán Bogdan Bogdanovic, que se lesionó el muslo en la primera parte y se quedó en el vestuario tras el descanso. «Aún no sabemos nada y estamos esperando el diagnóstico de los médicos», dijo Pesic en la rueda de prensa.
Filip Petrusev tampoco participó, pero por otros motivos. El pívot fue descalificado en el primer cuarto tras un empujón, y la FIBA impuso una multa de 5000 euros al nuevo jugador del Dubai BC a última hora de la noche. Petrusev se libró así de una suspensión, pero se ganó la ira de su entrenador.
Pesic critica a Petrusev
«Solo comento cosas sobre baloncesto», aclaró Pesic cuando le preguntaron por Petrusev. «Eso no fue baloncesto, es una cuestión de disciplina. ¿Dónde está el respeto por el equipo y por uno mismo? Un jugador de la selección serbia no puede hacer algo así cuando yo estoy en la banda como entrenador. Está prohibido».
No obstante, Pesic señaló que perdonaría a Petrusev y que esperaba que el jugador aprendiera algo de esta situación. Con victorias contra Estonia y Portugal, el gran favorito ha cumplido con su deber, ahora le espera el anfitrión, Letonia, que ya está bajo presión tras la derrota inicial contra Turquía.
Pesic está seguro de que el rendimiento contra Portugal no será suficiente contra los letones. «Espero que sea la última vez que jugamos así. No fuimos nosotros mismos. No se puede ganar todos los partidos, pero la actitud debe ser la adecuada y hay que respetar al rival».
