Alexander Zverev tiene que trabajar toda la noche en el US Open, pero lo hace con éxito.
A las 0.48 de la madrugada, hora local, Alexander Zverev respiró hondo en la ciudad que nunca duerme y, al final de una exigente noche de trabajo, pudo disfrutar de su cama. Con una actuación sólida, pero en absoluto sobresaliente, la estrella del tenis alemán ganó su traicionero partido de primera ronda en el US Open, pero Zverev tendrá que mejorar si quiere aspirar al título de Grand Slam en Nueva York.
«Sinceramente, hoy no ha sido un gran día. Pero he pasado, que es lo importante. Y lo he conseguido antes de la una, no a las tres», dijo el jugador de 28 años tras ganar por 6-2, 7-6 (7-4) 6:4 contra el tenaz chileno Alejandro Tabilo en el micrófono de la pista del enorme, pero ahora casi vacío, estadio Arthur Ashe. Allí sufrió en 2020, en la final contra Dominic Thiem, la que quizá sea la derrota más amarga de su carrera.
Zverev salva un punto de set
Zverev comenzó con fuerza y se llevó el primer set en solo 31 minutos. En el segundo set, Tabilo jugó mejor, Zverev se volvió demasiado pasivo, vaciló brevemente y tuvo que defender un punto de set con 5-6, antes de ganar también el segundo set y terminar el partido con autoridad en el tercero. Zverev también mantuvo la calma en los momentos delicados del tercer set.
El camino hasta una nueva final en Flushing Meadows aún es muy largo. En su segundo partido, Zverev se enfrentará al británico Jack Fearnley, al que ya venció en 2025 en la tercera ronda del Abierto de Australia y en la segunda ronda de Miami sin perder ningún set. «Hay mucho que mejorar. Pero estoy deseando que llegue el partido», dijo Zverev.
US Open: día exitoso para los alemanes
Su victoria en 2:08 horas fue el broche final de un día impecable para el tenis alemán en Nueva York. Antes, el martes, Daniel Altmaier había alcanzado la segunda ronda tras un emocionante partido de 4:46 horas contra el serbio Hamid Medjedovic (6:7, 7:5, 7:6, 6:7, 6:4), donde le espera Stefanos Tsitsipas.
En la categoría femenina, Eva Lys (6:0, 7:5 contra Francesca Jones) y Laura Siegemund (7:6, 2:6, 6:3 contra Diana Schnaider) ganaron sus partidos iniciales. De los solo seis hombres y mujeres alemanes, cinco han alcanzado la segunda ronda, donde Jan-Lennard Struff jugará el miércoles contra el danés Holger Rune.
Sin duda, las mayores esperanzas recaen sobre Zverev. En su regreso al estadio de tenis más grande del mundo, con 23 711 asientos, que estaba moderadamente lleno debido al tardío inicio del partido a las 22:40 hora local, el jugador de Hamburgo también luchó contra los desagradables recuerdos del año pasado: en aquel entonces, perdió en cuartos de final en el mismo lugar contra Taylor Fritz tras una actuación «desastrosa».
Zverev demasiado pasivo en algunos momentos
Se mostró tan recuperado de eso como de las complicadas semanas pasadas. Tras su eliminación en la primera ronda de Wimbledon, Zverev se quejó de problemas mentales y buscó ayuda profesional. Sin embargo, ahora «todo va en la dirección correcta», dijo el campeón olímpico de Tokio en Nueva York. Y mantuvo esa dirección.
Zverev había ganado con dificultad el único duelo que había disputado hasta ahora contra Tabilo en 2024, en la semifinal de Roma sobre tierra batida. Esta vez, le costó mucho menos enfrentarse al zurdo, que ha caído del puesto 19 al 122 en la clasificación mundial debido a una lesión. «Es sin duda uno de los 30 mejores jugadores», advirtió Zverev sobre Tabilo de camino al estadio.




