Tras la amarga descalificación en Las Vegas, Lando Norris anuncia que seguirá yendo al límite de forma agresiva a pesar de la lucha por el título
Tras la amarga doble descalificación de Lando Norris y Oscar Piastri en el Gran Premio de Las Vegas, McLaren subraya que quiere seguir arriesgando en la recta final del campeonato mundial. En la metrópoli del casino, ambos MCL39 fueron descalificados por un desgaste excesivo en los bajos.
Un revés que agravó de golpe la situación en el campeonato: Norris sigue liderando la clasificación de pilotos, pero solo con 24 puntos de ventaja sobre Piastri y Max Verstappen, que le siguen con los mismos puntos. Norris contradice la impresión de una configuración demasiado agresiva
Norris: ¡Más bien hemos corrido muy pocos riesgos!
A pesar del revés, Norris no quiere cambiar nada en el enfoque básico, sino todo lo contrario. El británico explica que McLaren no asumió demasiado riesgo en Las Vegas, sino demasiado poco: «En cierto modo, casi se podría decir que no asumimos suficiente riesgo», subraya. «Debido a nuestros problemas, fuimos incluso más lentos, no más rápidos».
Por lo tanto, para el próximo fin de semana en Catar, está «casi más motivado» para abordar la configuración con valentía. «Tendremos más rendimiento. En la Fórmula 1, siempre hay que ir al límite para ganar». La descalificación por la altura del coche no cambia nada: «Es mucho más complicado que decir simplemente: «Iban bajos, por eso eran rápidos»».
Por qué McLaren no juega sobre seguro a pesar de la lucha por el título
La lucha por el título está reñida, pero Norris lo tiene claro: jugar sobre seguro no es una opción. «Queremos ganar estas últimas carreras. Si no lo hacemos todo a la perfección, como en Brasil, Red Bull volverá a ser más rápido y nos ganará», advierte.
Por lo tanto, el enfoque sigue siendo el mismo: «Estamos aquí para ganar. Lucharemos hasta el final, y eso es lo que yo quiero». Solo con el máximo esfuerzo Norris podrá aprovechar la oportunidad histórica en la reñida lucha a tres bandas contra Red Bull y su propio coche gemelo.
El Gran Premio de Catar supone un reto especial: es el último fin de semana de sprint de la temporada, lo que supone un riesgo adicional, menos tiempo de entrenamiento y más equilibrios estratégicos. Después solo quedará la gran final en Abu Dabi.




