La UEFA volvió a posicionarse el lunes en contra de la celebración de partidos de las ligas nacionales fuera de Europa, pero aceptó las solicitudes de las federaciones española e italiana de trasladar un partido cada una a Miami y Perth, respectivamente, durante la temporada actual.
«Los partidos de liga deben disputarse en el propio país; cualquier otra cosa perjudicaría a los aficionados fieles y podría dar lugar a distorsiones en la competición», reiteró el presidente de la UEFA, Aleksander Ceferin, en un comunicado emitido el lunes, en el que reafirmaba la postura de la Unión Europea de Fútbol de rechazar el traslado de partidos de las ligas nacionales. «Nuestra consulta ha confirmado la importancia de estas preocupaciones. Quiero dar las gracias a las 55 federaciones nacionales por su compromiso constructivo y responsable en este delicado asunto».
No obstante, la UEFA aprobó en una reunión de su Comité Ejecutivo dos solicitudes que habían presentado previamente las federaciones española (RFEF) e italiana (FIGC). La RFEF había solicitado trasladar a Miami (EE. UU.) el partido de La Liga entre el Villarreal CF y el FC Barcelona en diciembre, mientras que la FIGC había solicitado trasladar a Perth (Australia) el partido de la Serie A entre el AC Milan y el Como 1907, que se disputará el 6 de febrero durante los Juegos Olímpicos de Invierno que se celebrarán en Milán (Australia). Ambas solicitudes han sido ahora aceptadas.
El marco regulatorio de la FIFA no es lo suficientemente claro y detallado
Tras la reunión del Comité Ejecutivo celebrada en septiembre en Tirana (Albania), en la que se aplazó la decisión, la UEFA llevó a cabo «nuevas consultas con las partes interesadas». Estas confirmaron «el rechazo generalizado al concepto ya expresado por los aficionados, otras ligas, clubes, jugadores e instituciones europeas». Sin embargo, dado que «el marco normativo pertinente de la FIFA, que actualmente se está revisando, no es lo suficientemente claro y detallado», el Comité Ejecutivo de la UEFA «ha decidido a regañadientes aprobar, con carácter excepcional, las dos solicitudes que se le han presentado». «Aunque es lamentable que estos dos partidos tengan que celebrarse, esta decisión es una excepción y no debe considerarse un precedente», asegura Ceferin: «Nuestro compromiso es claro: queremos proteger la integridad de las ligas nacionales y garantizar que el fútbol siga arraigado en su entorno local».
La UEFA participará activamente en los trabajos en curso de la FIFA para garantizar que las futuras normas preserven la integridad de las competiciones nacionales y el estrecho vínculo entre los clubes, sus aficionados y las comunidades locales.




