El polémico «partido fuera de casa» del FC Barcelona en Miami ha provocado la primera gran protesta en la Liga española. Se esperan más protestas en esta 9.ª jornada.
En el partido inaugural de la novena jornada entre el Real Oviedo y el Espanyol de Barcelona el viernes por la noche (0-2), los 22 jugadores titulares, entre los que se encontraba el exjugador del Darmstadt y actual profesional del Espanyol Clemens Riedel, permanecieron inmóviles en el campo durante 15 segundos tras el pitido inicial.
Sin embargo, los espectadores que veían el partido por televisión no se dieron cuenta de nada, ya que la dirección de la retransmisión mundial pasó a mostrar una vista exterior del estadio.
El sindicato de futbolistas anuncia protestas para toda la jornada
Sin embargo, las protestas no fueron una sorpresa total. Pocas horas antes del inicio del partido, el sindicato de futbolistas españoles había anunciado protestas para todos los encuentros de la 9.ª jornada, de viernes a lunes. Las acciones están dirigidas contra la «falta de transparencia y de diálogo» en relación con el traslado de un partido de liga a Estados Unidos, según informó el sindicato.
Concretamente, se trata, por supuesto, del partido entre el Villarreal CF y el FC Barcelona, que se disputará el 20 de diciembre en Miami, la ciudad adoptiva del icono del club Lionel Messi y de las exestrellas del Barça Jordi Alba, Sergio Busquets y Luis Suárez, tal y como comunicó La Liga la semana pasada. Esto ha provocado un amplio rechazo por parte de la mayoría de las aficiones y los clubes, que lo ven, por un lado, como un ataque a la cultura futbolística y, por otro, como una ventaja competitiva para el Barça, para el que un partido fuera de casa se convierte ahora en un partido que se percibe como en casa.
El entrenador del Barcelona, Hansi Flick, y el centrocampista Frenkie de Jong tampoco se mostraron muy contentos con su «partido fuera de casa». «Mis jugadores no están contentos con ello, yo tampoco lo estoy, pero La Liga ha decidido que jugaremos este partido», reiteró Flick en la rueda de prensa previa al partido contra el Girona del sábado, en la que volverá a haber protestas.
