Como seleccionador nacional, Alex Mumbru lleva casi un año al frente del equipo alemán de baloncesto. Sin embargo, a menos de dos semanas del inicio del Campeonato de Europa, queda claro que el nuevo sistema de juego del español aún no ha cuajado.
Con una ventaja final de diez puntos, la selección alemana ganó también el segundo partido de preparación para el Campeonato de Europa contra Eslovenia. Pero el partido no fue tan cómodo como lo indica el resultado.
En muchas fases, Alemania pareció desorganizada en posesión del balón. Se vio poco del baloncesto rápido que había anunciado el seleccionador Mumbrú. En su lugar, gracias también a la muy disciplinada defensa eslovena, el juego se limitó durante largos periodos a ataques en media cancha.
Sin embargo, esto no cambió la convicción del equipo. «Todos creemos en el sistema», declaró el capitán Schröder tras el partido. «En los entrenamientos también nos va muy bien. Ahora solo tenemos que trasladarlo al partido».
Wagner sobre el cansancio: «Estamos un poco cansados»
La fe dio sus frutos. Nada más comenzar la segunda parte, Alemania arrolló a una selección eslovena que parecía desorientada. Una racha de 20-2 alejó a los visitantes hasta los 15 puntos, y al descanso la ventaja era de doce.
Sin embargo, no duró mucho. Eslovenia salió con mucha fuerza, anotó varios triples y, de repente, se puso por delante en el marcador. En esta fase, Alemania pareció desbordada en defensa, donde también se colaron algunos errores de coordinación. «Creo que es algo que pasa en un partido», explicó Franz Wagner, quien también señaló el alto nivel de exigencia, ya que solo habían jugado entre ellos dos días antes: «En cualquier caso, estamos un poco cansados».
Schröder: «A todos en el vestuario nos viene bien y todos estamos motivados».
Al final, Dennis Schröder decidió el partido. A pocos minutos del final, el jugador de 31 años anotó ocho puntos seguidos, de una manera que el entrenador no podría haberlo hecho mejor. «Quiere jugar rápido, eso es lo que he hecho toda mi carrera».
Por eso, el capitán de la DBB no está muy preocupado por el nuevo sistema de juego de Mumbrú. «Desde el principio hemos jugado mucho al pick and roll. Si estás libre, tienes que lanzar directamente. Creo que eso le va bien a todos en nuestro vestuario y todos están motivados. Pero creo que aún se necesita algo más de tiempo».
Sin embargo, a los jugadores alemanes no les queda mucho tiempo. El próximo viernes y sábado les espera la siguiente prueba de fuego en Múnich. En el marco de la Supercopa, se enfrentarán primero a Turquía y, al día siguiente, a la superpotencia serbia. Además, el inicio del Campeonato de Europa tendrá lugar el 27 de agosto.
