Ayao Komatsu admite que el rendimiento del equipo Haas en Melbourne le afectó incluso físicamente: cómo el equipo logró rápidamente dar un giro a la situación
El director del equipo Haas, Ayao Komatsu, ha elogiado a su equipo: tras el desastroso comienzo de temporada en Australia, el equipo ha demostrado de lo que es capaz con una fuerte reacción y actualizaciones específicas.
Y eso que la preparación de la temporada había comenzado de forma prometedora. Al igual que el año pasado, Haas se centró en las pruebas de invierno en las carreras largas para seguir mejorando la gestión de los neumáticos. Según Komatsu, aparte de una tapa del motor suelta el último día de pruebas, todo fue «sobre ruedas». Por eso fue aún mayor la conmoción en el Gran Premio de Australia.
«Fue un verdadero shock», recuerda el japonés. «Nunca olvidaré esa sensación. Sinceramente, me sentí mal físicamente. No solo porque fuéramos últimos, sino porque nos faltaban seis décimas para ser penúltimos».
El origen del problema: en las rápidas curvas 9 y 10 de Melbourne, el VF-25 golpeaba con tanta fuerza que se perdía una gran cantidad de carga aerodinámica. Los pilotos tenían que levantar el pie del acelerador, lo que afectaba al tiempo por vuelta. Komatsu lo tuvo claro: «Era un problema fundamental y no podíamos esperar a la siguiente actualización prevista».
Una rápida actualización marca el punto de inflexión
En Suzuka, también un circuito de alta velocidad, era necesario dar un giro. Antes del fin de semana en Japón, Haas introdujo una primera actualización en los bajos, una reacción rápida que, según Komatsu, dio sus frutos. En Imola se introdujo otra mejora aerodinámica. Esta también se basó en las conclusiones extraídas en Melbourne.
«Estoy muy orgulloso de cómo ha reaccionado el equipo», afirma Komatsu. «En Melbourne apenas dormimos porque teníamos que comprender los problemas y tomar medidas de inmediato».
La última mejora en Silverstone es ahora una señal de que Haas ha conseguido controlar los problemas de Melbourne. Komatsu destaca que, a diferencia de años anteriores, en los que las actualizaciones apenas aportaban avances, con el VF-25 el equipo ha encontrado una vía de desarrollo que funciona.
«Lo que hemos conseguido en Silverstone ha sido una actualización normal, y ha funcionado», explica Komatsu. «Nuestro programa de desarrollo es ahora muy sólido. Si conseguimos rendir al máximo, tenemos un coche con el que podemos entrar en el top 10».
Actualmente, Haas ocupa el noveno puesto en la clasificación de constructores con 35 puntos, a solo ocho puntos del sexto puesto. «Todo está muy reñido», afirma Komatsu. «Tenemos que sacar el máximo partido cada fin de semana».
Mirando atrás, el jefe del equipo cree que un revés como el de Melbourne habría descarrilado al equipo hace un año. «En aquel momento habría sido catastrófico», afirma. «Pero ahora tenemos una base de confianza y trabajo en equipo. No podría estar más satisfecho con la reacción».




