Para el expiloto Timo Glock, Lance Stroll ha agotado su tiempo en la Fórmula 1: si él fuera jefe del equipo Aston Martin, el canadiense no tendría futuro en el equipo
«No», esa es la respuesta clara de Timo Glock a la pregunta de si, como jefe del equipo Aston Martin, seguiría con Lance Stroll la próxima temporada. Para el expiloto de Fórmula 1, el canadiense ha agotado su crédito. Y no se trata solo de sus apáticas actuaciones, como la de ayer en la rueda de prensa de la carrera en casa.
Stroll no es de ninguna ayuda para su equipo, sobre todo en la pista, y eso que ya lleva nueve años en la categoría reina. «Deportivamente, definitivamente no está donde debería estar después de tanto tiempo en la Fórmula 1», sentencia Glock en Sky.
La mayor debilidad de Stroll se pone de manifiesto sobre todo en la clasificación. Ha tenido siete compañeros de equipo en su carrera en la Fórmula 1 y solo ha podido vencer a uno de ellos en una clasificación interna: Paul di Resta, que sustituyó a Felipe Massa en Hungría en 2017 tras varios años de pausa.
Esto significa que tampoco pudo imponerse a Sergei Sirotkin, que, a diferencia de Stroll, era novato en Williams en 2018 y solo corrió una temporada, ni a Nico Hülkenberg, que sustituyó en cuatro carreras en Racing Point/Aston Martin.
«Ha sufrido derrotas relativamente claras y tampoco ha convencido realmente con su regularidad a lo largo de este año», opina Glock.
Aunque en cuanto a puntos está por delante de Fernando Alonso esta temporada, al principio se benefició mucho de las circunstancias y lleva desde China sin sumar puntos en un Gran Premio. Alonso abandonó en ambas carreras y hasta ahora siempre ha terminado por delante de Stroll (cuando ha visto la bandera a cuadros).
En la clasificación, el canadiense tiene un balance de 0-9 frente al bicampeón del mundo.
«Siempre hay algún fin de semana en el que parece que puede acercarse a Fernando Alonso, pero si lo miramos en conjunto, está demasiado lejos, es demasiado irregular», opina Glock. «Y, en consecuencia, comete errores». A esto se suman momentos emocionales como su supuesto arrebato en Barcelona, «lo que tampoco le ayuda».
Y, sin embargo, como hijo del propietario del equipo, Lawrence Stroll, el joven de 26 años parece tener carta blanca. Da igual cómo conduzca: Stroll tiene asegurado su asiento, lo que no gusta a todo el mundo.
Glock cree que Aston Martin debería dejar de pensar que Stroll tiene que ocupar un asiento. «En la situación actual, habría que reorganizarse para tener éxito», afirma el alemán.
Considera que el equipo necesita dos pilotos constantes y cita a Williams y McLaren como ejemplos positivos, en los que ambos pilotos impulsan al equipo. Aston Martin solo cuenta con Fernando Alonso. «Es un poco como un luchador solitario que intenta dar el paso», opina Glock. Pero eso no es suficiente a largo plazo.




