Racing Bulls se queda sin puntos en Miami a pesar de su combativa actuación y su gran ritmo al final. No obstante, hay optimismo para la carrera en casa, en Imola
El Gran Premio de Miami 2025 terminó con frustración y una oportunidad perdida de sumar puntos para el equipo Racing Bulls, pero también con importantes conclusiones. El director del equipo, Peter Bayer, habló después de la carrera de un día «muy, muy difícil», que se vio muy afectado por las previsiones meteorológicas erróneas.
«La situación inicial era que todos esperaban lluvia, lo que sin duda nos habría ayudado», explica Bayer. Pero la lluvia no llegó y con ella la oportunidad de aprovechar el caos estratégicamente.
Drama temprano para Lawson: «El coche estaba muy dañado»
Liam Lawson fue uno de los grandes desafortunados de la carrera. Ya en la primera curva se produjo una colisión con el Sauber de Jack Doohan. Aunque, según sus propias declaraciones, el piloto de Racing Bulls había hecho «una salida realmente buena» y veía un gran hueco delante de él, fue golpeado por un lado en el tumulto.
«Solo sentí un golpe, no sé exactamente qué pasó», dijo el neozelandés sin haber visto la repetición de la escena. Los comisarios decidieron no tomar medidas adicionales, lo que Lawson tomó nota, pero no quiso comentar antes de analizar la escena.
El resultado: un coche muy dañado que, según Lawson, era «bastante horrible» de conducir. Bayer confirma que Lawson perdió alrededor de un segundo por vuelta.
Al principio se le dejó seguir en pista, con la esperanza de que lloviera. «Si llueve, en el caos puede pasar cualquier cosa», afirmó Bayer. Pero cuando se hizo evidente que no iba a llover, Lawson fue llamado a boxes.
Hadjar en una lucha por las décimas con Tsunoda: «He querido demasiado»
Isack Hadjar, por su parte, pudo terminar la carrera y se quedó a las puertas de los puntos. El joven francés tenía delante a Yuki Tsunoda, que había recibido una penalización de cinco segundos por exceso de velocidad en el pit lane. «Sabía que estaba dentro de los cinco segundos, era una batalla por la clasificación contra él», explicó Hadjar tras la carrera.
Tenía la distancia en directo en la pantalla y lo dio todo, pero en la última vuelta cometió errores decisivos. «Quería demasiado», admite Hadjar.
Con solo 0,168 segundos de retraso, cruzó la meta detrás de Tsunoda, en undécima posición en lugar de décima, sin puntos a pesar de su buen ritmo. «Una décima en 25 vueltas o más, que hemos rodado con los neumáticos duros. Pero así son las cosas. Puede que Yuki también haya cometido algunos errores, pero yo he cometido demasiados».
Mala suerte en la estrategia, pero aún hay esperanza: «De repente, teníamos un coche de carreras»
El equipo tampoco tuvo suerte en la estrategia: poco después de la parada en boxes de Hadjar, salió el coche de seguridad virtual, para disgusto de Bayer: «Si hubiéramos podido aprovecharlo, habríamos salido por delante de Lewis [Hamilton]. Es lógico, probablemente nos habría adelantado. Pero entonces nos habríamos quedado de repente en novena posición».
Un rayo de esperanza: hacia el final de la carrera, el coche mostró un gran rendimiento, subraya Bayer. «Alan Permane nos dijo al final: «Chicos, no sé qué ha pasado, pero de repente, en lugar de un coche de clasificación, tenemos un coche de carrera»».
«Así que parece que hay un punto óptimo hacia el final, en el que el coche ha funcionado muy, muy bien. Isack volvió a alcanzar a Yuki, pero, por desgracia, lo echó todo a perder en la última vuelta, en el primer sector, en la primera curva».
A pesar de todos los contratiempos, el equipo afronta con optimismo la próxima carrera en Imola, el Gran Premio de casa de Racing Bulls. «Para el 90 % del equipo, eso significa dormir en casa», dice Bayer con una sonrisa y revela: «Tenemos planeada una gran actividad con nuestro equipo. Hemos comprado entradas para todos los empleados y empleadas para que puedan ver la carrera».
Con ello también se celebrará el 20.º aniversario del equipo, que surgió en 2006 de la antigua escudería Minardi. «No haremos una gran fiesta, pero lo celebraremos con el equipo», afirma Bayer.




