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Marcó la historia del boxeo alemán

Se cumple el primer aniversario de la muerte de la leyenda del boxeo y campeón olímpico Manfred Wolke. Fue uno de los mejores entrenadores del mundo y marcó la historia del boxeo alemán.

El 29 de mayo de 2025 se cumple el primer aniversario de la muerte de la leyenda del boxeo Manfred Wolke. El campeón olímpico de 1968 está considerado una de las mayores leyendas del boxeo alemán y también uno de los mejores entrenadores de la historia.

Wolke entrenó, entre otros, a las antiguas estrellas del boxeo alemán Henry Maske y Axel Schulz, a quienes ayudó a alcanzar el éxito. El 29 de mayo de 2024 falleció a los 81 años tras una larga y grave enfermedad.

Wolke: exitoso boxeador y entrenador en la RDA

Wolke nació el 14 de enero de 1943 en Potsdam, el menor de diez hermanos, y creció sin su padre, que murió en la Segunda Guerra Mundial. Este mecánico de locomotoras de formación fue un boxeador de élite, ganó la medalla de oro en peso welter para la RDA en los Juegos Olímpicos de México 1968 y fue subcampeón de Europa en 1967 y 1971. En 1972 fue abanderado de la RDA en los Juegos Olímpicos de Múnich.

Ya durante la división alemana, Wolke era un entrenador de éxito y formó a varios campeones olímpicos, además de Maske (oro en Seúl en 1988), también a Rudi Fink, campeón de peso pluma en Moscú en 1980.

Tras la reunificación, Wolke pasó al boxeo profesional junto con Maske y fichó por el club de boxeo de Wilfried Sauerland, cuya fama contribuyó a forjar de manera decisiva.

El «filósofo» detrás de Henry Maske y Axel Schulz

Bajo la tutela de Wolke, Maske se proclamó campeón mundial de peso semipesado de la IBF en 1993 y desató una fiebre por el boxeo en Alemania: los combates de Maske atraían regularmente a decenas de millones de espectadores ante la televisión. Fueron legendarios sus dos duelos Este-Oeste contra Graciano Rocchigiani, trágicamente fallecido en 2018.

Wolke también fue entrenador de Axel Schulz cuando este estuvo a punto de convertirse en campeón mundial de peso pesado en 1995 contra George Foreman. Wolke también estuvo presente en el regreso de Maske en 2007, cuando este se vengó de su derrota contra Virgil Hill.

Entre sus últimos pupilos se encontraban el ex campeón europeo de peso supermediano Danilo Häußler, Timo Hoffmann, Kai Kurzawa, Enad Licina y Artur Hein.

«Sin Manfred Wolke no habría conseguido nada de esto», declaró Maske, hoy de 61 años: «Con su gran experiencia, era capaz de convencer a sus boxeadores de lo que tenían que hacer y lo que no».

No solo le distinguía su talento para motivar, su ejemplo de disciplina y dureza, sino también su inteligencia. Wolke era «el filósofo entre los entrenadores, el espíritu refinado», afirmó Maske.

Wolke formaba parte de una generación de entrenadores alemanes de éxito, a la que también pertenecían Fritz Sdunek, entrenador de Klitschko fallecido en 2014, y Ulli Wegner.

Tras su muerte, Wegner destacó el legado de Wolke en una entrevista con la agencia de noticias alemana dpa: «Sin duda, fue uno de los mejores entrenadores del mundo. Es raro encontrar deportistas que tengan tanto éxito y, al mismo tiempo, trabajen tan bien como entrenadores».

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