El Arsenal era el favorito en los cuartos de final de la Copa de la Liga contra el Crystal Palace. Sin embargo, al final, los Gunners necesitaron la doble mala suerte de Maxence Lacroix y una emocionante tanda de penaltis para pasar a la siguiente ronda.
El Crystal Palace disputaba por séptima vez la Copa de la Liga en diciembre. Además, debido a su participación en la Conference League, este duelo era el cuarto en solo diez días. Para el entrenador del Palace, Oliver Glasner, motivo suficiente para criticar la planificación de la English Football League (EFL), ya que esta había aplazado el partido de la Copa de la Liga del 16 al 23 de diciembre.
El hecho de que, en cuartos de final, el Arsenal, probablemente el mejor equipo del mundo en la actualidad, esperara a los Eagles, fue la guinda del pastel desde el punto de vista del Palace. Y los Gunners, que venían de ganar por 1-0 al Everton en la liga, querían hacer honor a su condición de favoritos como líderes de la Premier League y de la Champions League.
Sin embargo, el entrenador Mikel Arteta puso en marcha la máquina de rotaciones y cambió ocho posiciones en su once inicial. Solo se mantuvo la defensa formada por Timber, Saliba y Calafiori.
Además, Gabriel Jesús celebró su regreso al once inicial tras sufrir una lesión de ligamentos cruzados en enero.
Por su parte, el entrenador del Palace, Oliver Glasner, solo realizó tres cambios tras la derrota por 1-4 ante el Leeds United. El portero de copa Benítez sustituyó a Henderson en la portería. Además, Canyot y Lerma sustituyeron a Clyne y Hughes.
Madueke se desespera ante Benítez
Pero, a pesar de los cambios, los Gunners dominaron desde el principio. Ya en el minuto 4, Madueke tuvo la primera oportunidad de adelantarse en el marcador, pero no la aprovechó. A continuación, los locales siguieron moviendo el balón entre sus filas, mientras que el Palace se replegaba en su área.
Aunque los rápidos contraataques de los Eagles dieron alguna que otra esperanza, en general la ventaja del Arsenal estaba más que asegurada. Sin embargo, ni Madueke (22′) ni Gabriel Jesus (25′) pudieron superar al portero del Palace, Benítez, que estaba en un gran momento. Los Gunners siguieron desperdiciando las mejores oportunidades, que llegaron gracias a los peligrosos centros al área del extremadamente fuerte Gabriel Martinelli. Pero Madueke volvió a fallar ante Benítez en el tercer intento (40′), y Timber remató de cabeza por encima de la portería (42′).
El gol en propia puerta de Lacroix no es suficiente para el Arsenal
Tras la avalancha de ocasiones del Arsenal en la primera parte, Glasner realizó dos cambios tras el descanso que aportaron algo más de estabilidad. Canvot y Nketiah, desbordados, dejaron su lugar a Clyne y Devenny. El Arsenal no pudo mantener la presión como en la primera parte, por lo que Wharton tuvo la primera ocasión realmente clara para los visitantes, pero su disparo se fue fuera por poco (59′).
A continuación, el Arsenal volvió a tomar las riendas del partido y, con las entradas de Trossard, Saka y Ödegaard, volvió a aumentar el ritmo. Este último, con un centro al cabezazo de Gabriel Jesus, volvió a acercar mucho a los Gunners al gol (70′).
Sin embargo, los Gunners tardaron un poco en romper el empate. Después de que Gabriel Jesus fallara ante Benítez (80′), el córner posterior entró por casualidad en la portería tras rebotar en la punta del pie del defensa del Eagles Lacroix (80′). Pero el Palace no se rindió, siguió atacando y consiguió remontar. En el minuto 90+5, el capitán Guehi empujó el balón tras un tiro libre para empatar el partido.
Lacroix se convierte en el desafortunado
Y así, el partido se decidió en una emocionante tanda de penaltis. Un total de 14 lanzadores mantuvieron la calma antes de que Saliba Benitez tampoco diera ninguna oportunidad. Al final, fue precisamente Lacroix el jugador del Palace que, tras su gol en propia puerta, falló el penalti decisivo: Kepa adivinó la esquina correcta.
Así, el Arsenal se clasificó para las semifinales de la Copa de la Liga, donde le espera el Chelsea.
Por su parte, los Eagles volvieron a quedar eliminados del torneo de la forma más amarga posible contra los Gunners. Sin embargo, ninguno de los dos equipos podrá descansar mucho tiempo. El sábado (16:00 h), el Arsenal se enfrentará al Brighton & Hove Albion en la liga. Un día después (17:30 h), el Palace recibirá al Tottenham Hotspur.

