Pierre Gasly echa la vista atrás a su etapa en Red Bull y sorprende con una declaración: el francés sintió sobre todo alivio cuando fue despedido
Pierre Gasly ha hablado abiertamente sobre la sensación de alivio que sintió cuando fue trasladado de Red Bull a Toro Rosso (ahora Racing Bulls) en 2019. El francés, que actualmente compite para Alpine, disputó su temporada de debut en la Fórmula 1 en 2018 con Toro Rosso, tras haber sido admitido en el equipo junior de Red Bull en 2014.
Tras una convincente temporada de debut, en la que terminó en el puesto 15 de la clasificación de pilotos y con 25 puntos de ventaja sobre su entonces compañero de equipo Brendon Hartley, Gasly se aseguró el codiciado asiento en Red Bull para la temporada 2019.
antes del Gran Premio de Bélgica, fue enviado de vuelta a Toro Rosso y sustituido por Alexander Albon. En una entrevista con F1.com, el piloto, ahora de 29 años, recuerda esta difícil etapa de su carrera. «No voy a mentir, fue triste», admite Gasly.
«En 2019, mi segundo año en la Fórmula 1, no recibí ningún apoyo por parte de nadie, en un equipo muy grande que apoyaba totalmente a Max [Verstappen], y con razón, porque él estaba obteniendo resultados».
Gasly describe los obstáculos internos: «Pero empecé con un nuevo ingeniero que venía de la Fórmula E y no tenía experiencia en la Fórmula 1. Así que era una dinámica extraña. No me dieron las herramientas necesarias para rendir al máximo».
«Intenté abrirme camino por mí mismo, porque quería hacerlo y, al fin y al cabo, estoy ahí para rendir.
Ellos no estaban contentos, pero yo tampoco lo estaba, porque me daba cuenta de que no podía demostrar mi potencial», explica el francés.
Luego, el alivio
«La decisión del equipo de sustituirlo a mitad de temporada le provocó sentimientos ambivalentes: «Casi fue un alivio».
Sobre sus primeros momentos de vuelta en la cabina del Toro Rosso, dice: «No es una energía agradable. Estoy ahí para hacer mi trabajo e intentar dar lo mejor de mí, pero había mucha negatividad. Tuve que pasar por ello. Solo quería conducir».