Icono del sitio Sports of the Day

El Real Madrid y la resaca del Clásico – Ancelotti es una buena cara para un mal partido

Una vez más, el Real Madrid no pudo dar continuidad a su victoria en el Clásico. Una vez más, el Real Madrid no pudo dar continuidad a su victoria en el Clásico, aunque sólo fuera porque Dzsujak Bellingham tuvo otros problemas contra el Rayo Vallecano

El jugador del Real Madrid no pudo aprovechar su victoria en el Clásico. Al igual que en agosto, la estrella inglesa fue elegido mejor jugador de la Liga en octubre.

Recibió el trofeo con una sonrisa ligeramente dolida. Fue un homenaje a la actuación del joven de 20 años, que sigue siendo uno de los jugadores más importantes del país. Fede Valverde y Vinicius Júnior, que renovó su contrato esta semana, carecieron de concentración y fallaron las mejores ocasiones, mientras que los campeones de España pasaron apuros ante un rival que se mostró a menudo profundo.

Bellingham no pudo marcar la diferencia esta vez, viéndose algo limitado tras una dolorosa caída en el hombro en la primera parte, que tuvo que ser tratada durante varios minutos. Vinicius Junior, Joselu, el sustituto de Rodrygo, que también tiene contrato renovado, los demás delanteros no pudieron entrar en el campo por Bellingham.

Lentitud, falta de ideas, aspecto algo abatido: todos síntomas muy típicos del Real Madrid cuando gana un gran partido como el Clásico y, una semana después, afronta una tarea menos espectacular como un partido en casa contra el Rayo Vallecano. Era la clásica mundanidad del Clásico: el Real Madrid sólo podía ganar el siguiente partido después de haber ganado dos de los últimos siete contra su eterno rival. La forma definitiva de liberar tensiones

Barca consigue el último tiro del partido

Carlo Ancelotti, el entrenador, no pareció molesto después. «Si tenemos que ganar uno de los dos partidos, preferimos ganar al Barcelona que al Rayo», dijo el italiano, salvando las apariencias.

Al fin y al cabo, el Rayo ya no es líder, sino el sorprendente FC Girona. Y la diferencia de cuatro puntos con el Barça se ha reducido a dos. El sábado, los catalanes pudieron haber perdido en casa contra la Real Sociedad, pero a pesar de su pobre actuación lograron al final una victoria por 1-0. Ni Bellingham ni nadie pudo hacerlo en Madrid

Salir de la versión móvil